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Why

1/1/09

Creo que las cosas son deliberadamente complicadas. Y nosotros, inevitablemente las hacemos mucho más difíciles de llevar.
Un ejemplo? Cuando hay algo que sabemos que es malo para nosotros y a pesar de los pesares nos obcecamos en creer que existe un atisbo de esperanza (malsana) que nos dice que en el fondo, no todo el monte es orégano.
Tendemos al infinito en momentos como esos (y ese es sólo un ejemplo), somos abnegados súbditos de una moral selectiva que nos dice que mandar a la mierda a todo hijo de vecino no está bien porque es cruel o porque en el fondo no somos tan malos. Pero... y si el hijo del vecino es un déspota hijo de puta, mentiroso que merece que la justicia divina se quite la venda de los ojos y cambie esa bascula que tiene por un AK-47? No, entonces tampoco, nos quejaremos del maldito niño malcriado y renegaremos tres veces de sus padres y el aire que lo alimenta, tendremos a nuestros amigos fritos con las historias del niño cabrón y ellos estarán aburridos de decirnos que lo mandemos a la mierda, y nosotros como seres completamente adultos (y estúpidos) les diremos que en el fondo, no es tan mal crio, que la culpa es del entorno, pero que es un encanto, aunque tiene problemas muy graves.
El final de la historia es típico, amigos cabreados (junto a un millón de "ya te lo dije") envueltos con un lacito rojo esperando a que abras la boca para reventarte a topicazos y cosas que echar en cara. Un hijo de vecino cabrón que pese a nuestro voto de confianza (voy contando que debe ser el 1.001) nos las seguirá haciendo pasar putas, porque los cretinos, no se hacen, nacen; y cada uno es lo que es. Y el botiquín cargado de dormidina, valium y almax (porque tanta pasti no puede ser buena).
Y todo eso para qué? Para quedarnos como estábamos cuando nos mudamos al lado del hijoputa.
Pensándolo bien, yo ahora, me mudaba de planeta o me iba a vivir a algún pueblo perdido de la mano de Marte, donde no existan los vecinos ni sus hijos.

Claro que esto es aplicable a todo el mundo, para mí, el hijo de mi vecino es la gente que pese a todo, siiiieeeemmmpre sigue incordiando.
Y para ti?

Un consell per canviar d'un any 8 a un any 9...
Mándalos a todos a la mierda! ( a mi también!)



-- Hasta hace unas horas pensaba que un corazón roto era imposible de destruir. He descubierto que me equivocaba, aunque sólo en parte. No se puede destruir, pero se puede  romper en trozos más pequeños. --



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